No tengo otra cosa que poder regalar a todo el mundo. Así que, para quien quiera apreciarla, ahí está mi palabra.

martes, 29 de mayo de 2012

El planeta de Anahi

Bella imagen sugerente.
Me hace ver de repente,
y reíros cuanto queráis,
con imaginaria lente,
caprichosa, potente,
el cuadro más loco y
el pintor mas ausente,
la obra más hermosa,
el sonido más silente,
colores chillones que
estallaron prudentes.
Nos veo pululando
entre los continentes:
amebas prepotentes,
mentes perturbadas,
con garras y dientes,
ciegos y videntes,
corazones desnudos,
enanitos dementes…
entre mares, abismos,
y sólidos puentes,
construidos por brazos
que buscan abrazos
en distantes vertientes.
Ahí veo a la guerra
y también la muerte.
¡Pero está la vida
hermosa y latente!
Ahí esta Anahi…
Y ahí estamos yo
y mi bendita suerte.
En tan gran planeta,
entre tanta corriente,
¿qué hará el corazón
para oler semejanzas,
para detectar mentes
y encontrar, tan lejos,
gente tan cercana,
tan buena gente?